miércoles, 7 de marzo de 2012

ÁNGEL IBÁÑEZ DEBERÍA DIMITIR


Alonso sobre Ibáñez y la deuda: «Yo, personalmente, hubiera dimitido»

El portavoz de UPyD señaló que su partido «estudia» si aprobar la proposición del PSOE
J. MAIQUES / Burgos
El portavoz de UPyD en el Ayuntamiento, Roberto Alonso, no quiso tomar partido ayer ni por el PP ni por el PSOE y señaló que su partido aún no tiene decidido si aprobará la proposición de los socialistas para pedir en el Pleno del viernes la dimisión del alcalde, Javier Lacalle, o, en su defecto, de su segundo en el equipo de Gobierno, Ángel Ibáñez. Lo que no quiere decir que no aprovechara la coyuntura para mandarles algún que otro tirón de oreja a los dos partidos mayoritarios.
Según Alonso, su equipo de concejales en el Ayuntamiento no ha tenido tiempo para analizar al detalle la propuesta de los socialistas y señaló que durante estos días «estudiarán» que postura adoptarán en el Pleno.
Al PSOE, sin dirigirse a ellos expresamente, le reprochó su actitud y, en contraposición a ellos, defendió que su formación no está en el Ayuntamiento «para pedir cabezas, sino que hemos venido a ser propositivos». En este sentido, y también en alusión a los socialistas, señaló que «los ciudadanos están hartos de judicializar la vida política. Los burgaleses piden cordura, trabajo...», indicó en un ataque implícito.
'Caso Espolón'
Pero que no diera la razón al PSOE no quiere decir que se la otorgara a los que, al igual que los socialistas, también son sus adversarios políticos en el Consistorio, el Partido Popular. Y aquí, Alonso, en lugar de hablar de la deuda a proveedores, prefirió retroceder en el tiempo -sin que fuera requerido a ello- y recordó que, hace meses, él mismo pidió «responsabilidades» por el 'caso Espolón'.
En este sentido, el portavoz de la formación magenta recordó las explicaciones dadas por el equipo de Gobierno por este caso y que se resolvieron con un informe que apuntaba a «un fallo multiorgánico». En el argumentario se apuntaba que esta era la razón por la que no se le reclamó al arrendatario el alquiler del local desde el año 2000 (casi 600.000 euros). Alonso, aún sin estar convencido, quiso conceder el beneficio de la duda a este razonamiento. Pero sólo hasta 2008. Y es que, según añadió, entonces, ese año, «sí se conocía» la deuda. Por tanto, a su juicio, no hay razón que explique por qué en ese momento no se llevó al empresario a los tribunales.
Pero el portavoz de UPyD fue más allá y apuntó lo que, a su entender, motivó que el equipo de Gobierno anterior no moviera ni un solo dedo para desalojar al inquilino: «la proximidad de las elecciones», afirmó a pesar de que, en ese momento, aún quedaban tres años para que se celebraran los comicios municipales.
Del mismo modo, criticó, para reforzar su punto de vista, que una postura como la que adoptó el equipo de Gobierno es inimaginable en una empresa privada o en ciudadano particular.
En cualquier caso, Alonso no pudo regatear más la postura de su partido sobre la petición de dimisión y zanjó el tema señalando, ahora sobre la deuda a proveedores, que «yo, personalmente, hubiera dimitido. Es mucho dinero para las arcas municipales».
Fuente: Correo de Burgos