viernes, 29 de junio de 2012

LOS ERES AUMENTAN EN BURGOS

En el primer semestre hubo tantos ERE como en 2008 y 2009 juntos.

258 expedientes. Afectan, sin incluir a las plantillas de Michelin y Bridgestone, a 3.120 trabajadores, 227 de los cuales fueron despedidos 
Después de más de cuatro años de crisis, los expediente de regulación de empleo (ERE) han dejado de ser excepcionales para convertirse en la fórmula cotidiana más utilizada por las empresas para soportar las caídas de la producción y las ventas o los problemas de liquidez. Por ello, cada año se bate un nuevo récord en la Oficina Territorial de Trabajo de la Junta de Castilla y León (OTT) y 2012 amenaza con romper todas las estadísticas conocidas. De hecho, el primer semestre termina con 258 ERE en la provincia, los mismos que se presentaron en los ejercicios 2008 y 2009 juntos y una cifra peligrosamente cercana a los 306 con los que concluyó el pasado año.
Detrás de estos números está, lógicamente, la recesión económica, pero es bueno matizarlos. De los 258 ERE tramitados a día de hoy (en los que se incluyen los de Bridgestone y Michelin), tan solo 15 son de extinción de contratos, aunque afectan a un total de 227 trabajadores. En el primer semestre del pasado año hubo 11 ERE de extinción con 150 despidos.
Pero la mayoría de los expedientes, 174, son temporales, de suspensión de jornada y, según detalla el jefe de la OTT, Antonio Corbí, en muchos casos se aplican en días salteados dependiendo de las necesidades de producción de la empresa -a modo de colchón de horas- y no llegan a ejecutarse en su totalidad. Este tipo de ERE (que no consume paro para el afectado hasta los 180 días) han crecido un 63,8% en el último año y afectan a 2.513 trabajadores en la provincia (sin contar con las plantillas de Michelin y Bridgestone que duplicarían ampliamente esta cifra).
Parecida evolución han tenido los ERE por horas, los de reducción de jornada, que suman 69 a día de hoy, el triple que hace un año (22). De hecho, la posibilidad de estar en paro la mitad de la jornada, o una parte de la misma, es una fórmula desconocida en los primeros años de crisis y consagrada con las últimas reformas. Su objetivo: ajustar al máximo los horarios laborales a la carga de trabajo. El comercio es un sector habitual en estos ERE de reducción, que en lo que va de año ya afectan a 380 trabajadores frente a los 103 del pasado ejercicio.
Antonio Corbí no espera una mejoría sensible en el mercado laboral provincial en el segundo semestre, salvo el lógico parón producido por el tiempo vacacional, donde crece la actividad en hostelería y construcción. «La mayoría de las empresas que vienen a la OTT están vinculadas al sector de la construcción y su industria auxiliar (inmobiliarias, instaladoras, madereras, comercios...). La gran industria de la automoción y la alimentación, estratégicas para Burgos, no tienen estos problemas por el momento y parece que están soportando mejor la crisis», explica la Autoridad Laboral
Reforma
La entrada en vigor el pasado 11 de febrero de la Reforma Laboral ha facilitado la tramitación de más ERE, dado que las empresas pueden presentarlos y aplicarlos sin que necesariamente medie un acuerdo con los trabajadores. Todo el procedimiento sigue siendo supervisado por la Autoridad Laboral, que no ha dejado de ofertar su mediación en caso de conflicto, aunque, según explica Antonio Corbí, en la gran mayoría de los casos los ERE llegan a su despacho con el acuerdo previo entre las partes y son comunicados al Inem para que puedan ser ejecutados.

Es más, a pesar de los temores expresados reiteradamente por los sindicatos, hasta la fecha ninguno de los ERE tramitados en Burgos y que no lograron el acuerdo entre las partes ha terminado en el Juzgado de lo Social por una demanda presentada por los trabajadores contra la empresa.
Fuente: Diario de Burgos