martes, 9 de julio de 2013

HABER SI SE LLEGA A UN CONSENSO CON LOS VECINOS

El Ayuntamiento amplía a 16 las líneas de bus para unir el barrio del Pilar con el Hospital

PP y PSOE consensúan la remodelación del transporte urbano que podría entrar en vigor el 1 de enero de 2014
El consenso político para acometer la remodelación del autobús urbano comienza a dar frutos. PP y PSOE en el Ayuntamiento de Burgos se comprometieron a celebrar una reunión al concluir las fiestas para aunar criterios y así lo han hecho.
El encuentro tuvo lugar ayer y ya hay resultados. El plan inicial que presentó el equipo de Gobierno contemplaba 15 líneas de autobús. Esa cifra se ha incrementado a 16, porque se ha añadido una más que permitirá conectar el barrio del Pilar con el Hospital a través de la calle Vicente Aleixandre.
El análisis político que hace cada partido de este aumento es divergente. El concejal de Transporte, Esteban Rebollo, asegura que la línea se añadió tras escuchar las necesidades de los vecinos. El PSOE, por contra, estima que es un logro propio porque en su plan alternativo contemplaron 17 líneas frente a las 15 diseñadas.
Al margen de quién se cuelgue la medalla, lo que cuenta para los vecinos es que una de sus reivindicaciones, planteadas a los dos partidos, ha logrado salir adelante y el barrio estará conectado con el centro sanitario. O como resume Rebollo, «si la idea es buena, que más da de qué color proceda».
En el encuentro celebrado ayer participaron, además del edil de Transporte, los concejales socialistas Carlos Andrés Mahamud , Javier Santos y Mar Ramírez, que también son consejeros de la empresa Samyt, así como Antonio Fernández Santos, también del PSOE, y la gerente de la empresa.
La cita se repetirá este jueves. A primera hora volverán a analizar las propuestas de ambos partidos y posiblemente se adopte una decisión definitiva. El concejal del PSOE Carlos Andrés Mahamud asegura que la buena predisposición de ambas fuerzas podría derivar en que de la reunión se salga ya con una fecha de implantación del nuevo modelo de autobús: el 1 de enero de 2013.
El edil de Transportes no descarta la fecha propuesta por el principal partido de la oposición, aunque advierte que aún quedan demasiados flecos pendientes. Recuerda que la remodelación implica nuevas líneas y trayectos, lo que conllevará cambios en las condiciones laborales de la plantilla de la empresa de autobuses. El PSOE también coincide en la necesidad de hablar previamente con los trabajadores y sobre todo con los conductores.
Esteban Rebollo, sin descartar de plano la fecha, no se atreve a dar el sí consciente de que la entrada en vigor de un nuevo mapa de autobuses en una ciudad con 180.000 habitantes es una operación «compleja» que no puede hacerse con un exceso de premura. Otro asunto que estará sobre la mesa el próximo jueves serán las frecuencias y las paradas que tendrá el nuevo mapa del autobús urbano.
En estas reuniones han quedado al margen los otros dos partidos de la oposición: Izquierda Unida y UPyD. Desde las filas socialistas aseguran que no tendría demasiado sentido que los otros grupos se sentaran a negociar cuando no se han molestado en elaborar un plan alternativo al presentado por el equipo del PP.
Los dos partidos mayoritarios han optado en este asunto por el consenso y su predisposición ya arroja resultados.
C. M. / Burgos

El alcalde de Burgos anunció en el último Pleno que el mapa de la nueva red de transporte urbano no era un documento definitivo, sino el punto de arranque para someterlo a la opinión pública. Su concejal de Transporte se ha aprendido la lección y si antes se le acusó públicamente, tanto desde la bancada de la oposición como desde los colectivos vecinales, de no haber tenido en cuenta las necesidades de la ciudad, ahora ha dado un vuelco en su actuación.
Ya va por la tercera ronda de encuentros con las asociaciones y no descarta una cuarta. Asegura que si el próximo jueves se diseña ya un mapa nuevo con las líneas de autobús fruto del consenso con el PSOE éste debería volver a someterse al juicio de los usuarios.
Si Rebollo cumple este compromiso los vecinos conocerían de primera manos cómo se han recogida en el mapa sus aportaciones, cómo se han corregido errores anteriores y cómo quedará de forma definitiva la red de autobuses.
El concejal de Transporte se muestra partidario de no acelerar los tiempos porque es consciente de que la remodelación será un proyecto que se prolongará durante décadas en la ciudad.
Fuente: Diario de Burgos