miércoles, 5 de noviembre de 2014

YA ESTA LA ENCUESTA DEL CIS

Podemos quiebra el bipartidismo y ya lidera la intención directa de voto

El partido de Iglesias reafirma su auge y pisa los talones a los socialistas en estimación de sufragios

El PP sigue cayendo pero ganaría hoy los comicios con el 27,5% de apoyos frente al 23,9% del PSOE

JUAN RUIZ SIERRA / MADRID
JUEVES, 6 DE NOVIEMBRE DEL 2014
Si las elecciones generales se hubieran celebrado entre el 1 y el 13 de octubre y hubiesen consistido en 2.480 entrevistas cuyos resultados se hubieran cruzado después con variables como el recuerdo de voto, la fidelidad a unas siglas, la tasa de participación estimada y la valoración de los partidos y sus líderes, el ganador habría sido el PP. Los populares habrían cosechado el 27,5% de los sufragios, frente al 23,9% del PSOE y el 22,5% del gran fenómeno político de los últimos tiempos, Podemos, ya muy cerca de los socialistas en este apartado, según reflejó ayer la estimación de voto del barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). En cambio, si los comicios se hubieran llevado a cabo solo con las respuestas espontáneas de los mismos encuestados (es decir, el voto directo), la victoria habría tenido como destinatario al partido liderado por Pablo Iglesias con un 17,6% de apoyos, por delante del 14,3% del PSOE y el 11,7% del PP.
En cualquier caso, más allá de una cocina demoscópica que en la España de hoy es más difícil de calibrar que en la de hace solo unos meses -Podemos acaba de nacer y no hay en su caso recuerdo de voto posible para realizar la proyección-, el sondeo del organismo público dibuja un escenario poselectoral impredecible, en el que el tradicional bipartidismo se ha roto y nadie tiene mayoría suficiente para gobernar sin pactos de por medio.


El trabajo de campo de este último barómetro se llevó a cabo en unas condiciones adversas para el PP: en pleno escándalo de las tarjetas opacas de Caja Madrid y con la crisis del ébola recién llegada, cuando la auxiliar Teresa Romero acababa de ser infectada, la ministra de Sanidad, Ana Mato, daba ruedas de prensa huérfanas de explicaciones y el consejero de la Comunidad de Madrid, Javier Rodríguez, acusaba a la paciente de «mentir». El momento puede explicar parte de la caída de los conservadores, que en el anterior sondeo del CIS, en julio, tenían 2,5 puntos más que ahora en estimación de voto (un 30%) y 1,1 más en voto directo (12,8%).
Aun así, las fechas de la encuesta tampoco fueron las mejores para el PSOE, partido que estuvo asimismo implicado en los manejos de la extinta caja de ahorros, aunque en menor medida que el PP. Sin embargo, los socialistas, cuyo nuevo secretario general, Pedro Sánchez, acaba de cumplir 100 días en el cargo, aumentan sus apoyos en 3,7 puntos en intención directa de voto y en 2,7 en estimación. Pero el sondeo de julio no fue el mejor indicador para el principal partido de la oposición. Alfredo Pérez Rubalcaba había dejado el liderazgo y Sánchez aún no lo había asumido. Si se comparan los resultados de ayer con los del barómetro de abril, el PSOE obtiene ahora un mejor resultado en voto directo (cosechó un 13,4%, frente al 14,3% actual), pero peor en estimación, ya que obtuvo en aquel momento un 26,2%. Es decir, 2,3 puntos más.
Mucho ha cambiado el panorama desde entonces. La principal diferencia es Podemos, que en ocho meses ha pasado de ser considerado un elemento anecdótico a lograr cinco escaños en el Parlamento Europeo a, por último, convertirse en la primera fuerza en voto directo. En julio, el CIS ya colocó a Podemos segundo en este apartado (11,9%) y tercero en estimación (15,3%), pero el partido va a más, engullendo por el camino gran parte del capital atesorado por IU-ICV y UPD. La fuerza que dirige Iglesias, cuya retórica se mueve entre los conceptos de arriba y abajo más que entre izquierda y derecha, no solo se nutre de estas siglas, sino también, y muy especialmente, de antiguos votantes del PSOE, así como de ciudadanos que en las últimas generales apoyaron al PP o bien se abstuvieron.

Por debajo de los tres partidos mayoritarios se sitúan la federación de izquierdas liderada por Cayo Lara (3,7% en voto directo y 4,8% en estimación) y el partido de Rosa Díez (2,1% y 4,1%). El barómetro también refleja un vuelco en el electorado catalán, que parece volver a preferir a CiU frente a ERC en unas generales. La federación nacionalista logra un 3,8% en estimación, mientras que los republicanos cosechan un 2,3%. En el anterior barómetro, ERC aventajaba a CiU en cuatro décimas: 3,3% frente a 2,9%. Aun así, las encuestas del CIS son poco representativas para los partidos de ámbito autonómico. Al realizarse en todo el Estado, las muestras en cada comunidad son reducidas.
El sondeo, por último, consigna otro elemento esperanzador para el PSOE: Sánchez obtiene una valoración de 3,85 frente al 2,31 deMariano Rajoy, el presidente de un Gobierno donde todos los ministros suspenden. El CIS no preguntó por Iglesias.
Fuente: elPeriodico