sábado, 7 de noviembre de 2015

LOS POLÍTICOS QUIEREN A CIUDADANOS SIN CULTURA

Bauman: «Sacar la filosofía de las aulas sería un error»

El sociólogo polaco y el filósofo español Javier Gomá pasan una larga jornada a orillas del Arlanzón que culminó en el Fórum ante casi 500 personas en un diálogo sobre el momento histórico actual y el papel de la cultura en él.

La periodista Mara Torres animó y moderó el diálogo entre el sociólogo polaco Zygmunt Bauman (i.) y el filósofo español Javier Gomá en la sala de congresos del Fórum. - Raúl Ochoa

La crisis de la cultura, la falta de respuesta de los individuos ante la amenaza de su seguridad y su libertad, los riesgos de las nuevas tecnologías, el miedo a los cambios, el peligro de alejar a los jóvenes del pensamiento... Estos conceptos y un sinfín más bailaron sobre el escenario de la sala de congresos del Fórum Evolución al ritmo de las palabras del sociólogo polaco Zigmunt Bauman y el filósofo español Javier Gomá. Ambos mantuvieron un diálogo moderado por la periodista Mara Torres que da el pistoletazo de salida al II Foro de la Cultura, que se celebrará del 3 al 5 de noviembre de 2016.
La charla, mantenida ante casi 500 personas -no se ocuparon todas las butacas aunque las invitaciones estaban agotadas-, se alargó durante una hora y media y fue la guinda a una intensa jornada que había comenzado por la mañana con la bienvenida a los invitados del alcalde, Javier Lacalle, y la rueda de prensa posterior.
Incrédulo repreguntó Zigmunt Bauman si era cierto que el Gobierno se planteaba reducir la carga de la asignatura de filosofía de los currículos escolares. «Sacar la filosofía de las aulas sería un error», observó el Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades, que no entendía esta decisión máxime cuando en la mayoría de los países ocurre lo contrario, que ahora no está y quieren introducirla. «En cada sociedad, la filosofía cumple este papel de explicar a los alumnos la base del pensamiento lógico. Es un arte extremadamente importante», enfatizó y advirtió su necesidad más ahora que nunca que vivimos «en la era de la individualización y lo que antes se le daba hecho al individuo por la convivencia en una comunidad, ahora se tiene que proveer él solo su propia subsistencia, buscarse la vida».
Y aseguró que en esta realidad el filósofo tiene el papel de construir una nueva estructura social que dé soporte al individuo en esa búsqueda, en ese hallazgo de las herramientas necesarias porque, auguró, «al final nos vamos a convertir en siervos voluntarios».
Una sociedad en la que, durante el diálogo, también observó la dificultad de encontrar un equilibrio perfecto entre seguridad y libertad, «dos valores fundamentales de la vida».
La presencia de ambos pensadores en el Foro de la Cultura propiciaba interrogarlos sobre esta y su papel en la sociedad actual.
Javier Gomá señaló que la crisis no afecta a la creación cultural ni a la mentalidad colectiva que dibuja la cultura de un país o un continente, pero sí alertó de, por ejemplo, las dificultades que puede encontrar un director de cine para producir una película. «En la crisis la industria y la política cultural han sufrido mucho», destacó el también director de la Fundación Juan March.
De acuerdo estuvieron los dos teóricos al preguntarles si se puede pensar en una sociedad con tanto ruido y que va tan rápido. Para ambos la respuesta es afirmativa, aunque el sociólogo polaco colocó el interrogante en otro punto.
«El problema no es que la gente deje de filosofar, sino cómo lo aplicamos a la vida diaria. La cultura es dar sentido a lo que ya existe y debemos cuestionarnos la relación entre lo que los filósofos piensan y la práctica de este análisis en la vida diaria humana», remarcó quien acuñó el término de modernidad líquida, esa sociedad que va y viene.
A Gomá ni se le pasa por la cabeza la extinción de los filósofos por culpa de una sociedad estresada y siempre con prisas. «La filosofía pertenece a todos, todo el mundo tiene una interpretación del mundo y por sí ya es filosófica. Las hay más inteligentes, sabias o razonadas, que ayudan a tener una vida diferente, y también lo contrario, interpretaciones vulgares, elementales o instintivas, pero ahí surge la filosofía en un segundo sentido, en el de ese grupo de personas que ayudan a una mejor interpretación del mundo, que dedican sus mejores horas, sus mejores días y sus mejores años a algo que nadie les ha pedido», indica y aplaudió a aquellos que comprenden que ese pensamiento pertenece a todo el mundo y proyectan sus pensamientos de forma literaria como, aseguró, hace Bauman.
Y es que flores, aunque no cayeron al escenario como pasa con las folclóricas, hubo muchas, en todas las direcciones, de los invitados entre ellos, de estos para la organización del Foro de la Cultura...
Fuente: Correo de Burgos